Sinceridad .......

Sinceridad

§    Sinceridad = veracidad, franqueza, rectitud, pureza, sencillez, buena fe, cordialidad, limpieza de corazón… Un hombre sincero es, en consecuencia, veraz y sin dobleces.

§    Sincera es la persona que aborrece la mentira.

§    Todos nosotros hemos quedado cautivados alguna vez por quienes en nuestra presencia han tenido una conducta sincera, y cuando hemos logrado descubrir que esa conducta sólo ha sido aparentemente sincera, es decir, falsa , hipócrita, fingida, nuestra admiración ha pasado al extremo opuesto, convirtiéndose en desprecio.

§    ¿Qué se necesita para que alcancemos el celeste galardón de la sinceridad? ¡Que conformemos nuestros actos con nuestras palabras, y nuestras palabras con nuestros pensamientos!

§    En términos más sencillo para ser sinceros basta que expresen los labios lo que guarda el corazón. En síntesis: Ser como somos.

§    La sinceridad es abrir el corazón para mostrarnos como somos: es un amor de la verdad, una repugnancia del disimulo, un deseo de resarcirse de los propios defectos y de amenguarlos con el mérito de la confesión. La Rochefoulcauld.

§    ¿Qué puede haber más dulce ni más cómodo que ser sincero, estar tranquilo, de acuerdo consigo mismo, sin nada que temer ni que inventar? En cambio, una persona con disimulo se halla siempre agitada, con remordimientos, en peligro y en la más deplorable necesidad de encubrir una argucia con otras cien. Fénelon.

§    No seas confuso en tus palabras; cuando hables, hazlo con lentitud y llanamente. Llama “pan” al pan, di con la lengua lo que tienes en el corazón, y habla con claridad para que todos te comprendan. San Bernardino de  Sierra.

§    Si vivimos sinceramente, veremos con claridad. Tan fácil es al fuerte ser fuerte como Al débil ser débil. Emerson.

§    Los hombres cuyos actos están en abierta contradicción con sus palabras, no inspiran respeto, y lo que dicen tiene poco peso; hasta las verdades, cuando condichas por ellos, parecen que salen marchitas de sus labios. Samuel Smiles.

§    Su “No” era un “no” sin apelación; su “Sí” era un “si “omnipotente, y cuando lo daba lo hacía a sabiendas; sus pensamientos y sus palabras estaban siempre acordes: por sí solas tenían la fuerza de un juramento. Inscripción en la tumba del barón Stein.

§    ¡Cuán dichoso es aquél que por su nacimiento y por su educación, no está sujeto a la voluntad de los otros!; ¡que no tiene por armadura sino sus pensamientos honrados y en quien toda su habilidad consiste en ser verdadero! Anónimo.

§    Los mejores actos se desvirtúan y pierden mérito por la manera de hacerlos, haciendo hasta dudar de las intenciones. El que protege o alaba la virtud por la virtud o censura el vicio por el vicio, obra sencillamente, naturalmente, sin ningún rodeo, sin ninguna singularidad, sin fasto, sin afectación; no hace uso de respuestas graves y sentenciosas, y menos de observaciones picantes y satíricas; no trata nunca de representar una comedia para el público, sino de dar un ejemplo y cumplir un deber; no pierde el tiempo visitando señoras y yendo a las tertulias. El bien que hace es sin duda menos conocido, pero hecho está: ¿qué más puede desear? La Bruyere.

§    Reconoce, acepta y ofrece tus limitaciones como también tus cualidades. Posees algunas. No es humildad creerse humanamente el más desprovisto de todos, sino comedia o tontería. Michel Quoist.

§    El que se adelanta a confesar el defecto propio, cierra la boca a los demás; no es desprecio de sí mismo, sino heroica bizarría; y al contrario de la alabanza, en boca propia se ennoblece. Gracián.